
El martilleo en la cabeza. La ropa abandonada por cualquier parte. El olvido. El regusto dulce del Martini se va convirtiendo en amargo y abrasador. Más martilleos. De repente una maceta rota. Plantas aplastadas. Mi codo duele. ¿Fui yo el causante de ello? Seguro. Ayer debió ser una gran noche...
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holly -
marquinho -